Libre de filtros químicos, fragancias sintéticas, nanopartículas y disruptores hormonales.
Una alternativa segura y consciente para cuidar tu piel, el agua y todos los seres que habitan en ella.
Los bloqueadores solares convencionales no solo alteran tu salud, sino que también contaminan ríos, lagos y océanos, afectando la vida marina y los ecosistemas acuáticos.
Al evitar bloqueadores convencionales, también cuidas tu sistema endocrino, tu campo energético y tu capacidad de absorber la luz de forma más pura.
Elegir un protector natural es cuidar tu cuerpo y también tu huella en el planeta.
🔆 Ingredientes
• 3 cucharadas de aceite de coco orgánico
(hidratante y con protección solar natural)
• 2 cucharadas de manteca de karité
(nutritiva, regeneradora y ligeramente protectora)
• 2 cucharadas de óxido de zinc no nano
(filtro físico seguro, reflectante de rayos UVA y UVB)
• 1 cucharada de aceite de semilla de frambuesa
(alto factor de protección natural y antioxidante)
• 10 gotas de aceite esencial de lavanda o manzanilla
(calmante y antinflamatorio para piel sensible)
🧴 Instrucciones
1 En baño maría, derrite el aceite de coco y la manteca de karité hasta que estén completamente líquidos.
2 Retira del fuego y agrega el óxido de zinc lentamente, mezclando con espátula de silicona (evita el metal).
3 Agrega el aceite de semilla de frambuesa y el aceite esencial. Mezcla bien hasta obtener una textura homogénea.
4 Deja enfriar y guarda en un frasco de vidrio opaco o metálico, preferiblemente hermético.
📝 Notas
• Aplícalo generosamente antes de exponerte al sol y reaplica cada 2-3 horas si sudas o te mojas.
• No es resistente al agua.
• El óxido de zinc puede dejar una ligera capa blanca, pero es lo que bloquea los rayos UV sin alterar tu cuerpo.
Deja tu Huella Natural 🌱